Sé parte de los 50.000 lectores diarios de la unica revista totalmente multimedia. Seleccionamos para ti las mejores tiendas delicatessen, restaurantes, alojamientos y bares. Bonus de ofrecemos un amplio de recetario y explicamos los beneficios para la salud de los productos que consumimos. revistas gastronomicas españa, revista gastronomica gourmet, vino+gastronomia,revista gastronomica sibaritas, publicaciones gastronomicas,revista de gastronomia en català, revistas gourmet, revistas de cocina españa, recetas caseras, recetas tapas, recetas de postres, recetas de cocina arguiñano, recetas de cocina aperitivos, ,recetas de cocina española, recetas de cocina andaluza, recetas de cocina faciles, opiniones bares y restaurantes, opiniones restaurantes, restaurantes cercanos a mi ubicación, restaurantes cerca de aquí, restaurantes cerca de donde estoy, restaurante cerca de mi posicion, bares cerca de mi ubicación,restaurantes cerca de mi zona, restaurantes proximos a mi ubicacion
Las coles de Bruselas, llamadas también repollos de Bruselas (del grupo Gemmifera de Brassica oleracea; su nombre científico es Brassica oleracea var. gemmifera) es un grupo que se cultiva sobre todo en invierno, de las coles caracterizado por su pequeño diámetro que se asemeja a diminutas coles. Técnicamente son brotes que aparecen del tallo de la planta y se recolectan cuando tienen una textura firme y un color verde intenso (existen variedades con colores rojo y/o morado). El borde de las hojas que cubre el núcleo central puede tener color ligeramente amarillento. El sabor es generalmente algo dulzón pero, a veces, con un fondo ligeramente amargo (debido a trazas de glucosinolato: sinigrina y progoitrina).
Esta planta es relativamente reciente, ya que aparecen descripciones de la misma a inicios del siglo XIX (aproximadamente en 1821) en las cercanías de Bruselas, el nombre vulgar era “Choux de Bruxelles”.
Aparece frecuentemente asociada en Europa a platos invernales, como casi todas las coles. Algunas variedades tienen un ligero sabor amargo. La forma en que se deben cocinar ha sido origen de un acalorado debate, ya que existen muchas recetas caseras que evitan el olor desagradable y que al mismo tiempo ayudan a mantener el aroma dulzón a nueces, una de las opciones es la técnica de cocina conocida como Stir frying. Muchos cocineros consideran que la col tiene sus máximas propiedades aromáticas y organolépticas a finales del invierno, cuando los brotes han sido expuestos a las heladas invernales.
Dentro de sus propiedades, se ha comprobado la importancia que tienen todas las coles en impedir la aparición de los tumores cancerosos. De entre todas ellas, Las coles de Bruselas constituyen los alimentos más adecuados para que no se desarrollen cánceres en el aparato digestivo.
Se ha comprobado como aquellas personas que comen habitualmente este alimento presentan los índices más bajos de esta enfermedad.
La razón de todo ello hay que atribuirle a la presencia de una serie de elementos anticancerosos: los carotenoides, la clorofila y los glucosinolatos. Todos ellos son potentes antioxidantes que estimulan las enzimas en el hígado, neutralizando los poderes cancerosos de las aflatoxinas. Con ello impiden la aparición de tumores en el colon, estómago y vejiga urinaria. Su riqueza en fibra también favorece la prevención del cáncer y puede aprovecharse para el estreñimiento.
Es bastante rica en vitamina A que resulta muy imprescindible para una buena visión, llegando a producir ceguera cuando las deficiencias en esta vitamina son muy importantes. También juega un papel importante en la salud de la piel y de las membranas del aparato respiratorio, así como el crecimiento de los huesos. Sin llegar a los niveles que poseen las zanahorias, y sobre todo las espinacas, las coles de Bruselas pueden ser otra alternativa para adquirir esta saludable vitamina.
Contienen mucha vitamina C más que las naranjas o los limones, aunque inferior a los pimientos o las espinacas. Es igualmente importante esta vitamina para la adecuada absorción del hierro, del calcio o de otros aminoácidos. De igual manera ayuda en la curación de las heridas.
Su deficiencia provoca una debilidad general en el organismo, manifestada en síntomas como cabello frágil, encías que sangran, heridas que no cicatrizan, pérdida del apetito etc. Es especialmente interesante comer este fruto en épocas de convalecencia, después de haber pasado alguna enfermedad porque ayuda a incrementar las defensas.
Es un alimento muy adecuado para los que sufran retención de líquidos, por lo que deberán comerlo habitualmente los obesos o artríticos o quienes pretendan bajar peso. Su riqueza en potasio interviene en la eliminación de líquidos corporales y en otros procesos muy interesantes como la calcificación ósea, el buen funcionamiento del corazón, del sistema nervioso o la construcción de la masa muscular.
Contienen mucho ácido fólico (folato). Un plato de estas hortalizas garantiza prácticamente las necesidades diarias de este elemento que se cifra en 200 microgramos, por ello, resultan muy adecuadas para el embarazo, dado que este alimento es necesario para que el parto se lleve adelante con normalidad.
Intervienen en la formación de los glóbulos rojos en combinación con la vitamina B12 y las células del organismo en general.
Y hoy también vamos a por una receta.
Coles de Bruselas con jamón.
Ingredientes:
1 vaso de agua.
20 coles de Bruselas.
100 gramos de jamón serrano.
100 gramos de cebolla.
1 diente de ajo.
1 rama de perejil fresco.
1 vaso pequeño de vino blanco.
1 pizca de sal y 1 pizca de pimienta.
2 cucharadas soperas de pan rallado.
4 cucharadas soperas de aceite de oliva.
Preparación:
En una cazuela ponemos a cocer las coles con agua y sal durante 20 minutos. Mientras, en una sartén con cuatro cucharadas de aceite de oliva, doramos la cebolla que habremos picado en cuadraditos muy pequeños.
Cuando esté dorada, agregamos el diente de ajo (también finamente picado), el jamón picado, el pan rallado y el vino blanco.
Cuando se evapore el alcohol del vino añadimos un poco del agua de cocer las coles y un poco de perejil picado.
Esta salsa la vertemos sobre las coles y dejamos hervir 5 minutos.
Y listo, para servir y comer.
Por todas las propiedades que he comentado anteriormente, animarse a comer Coles de Bruselas.
La patata o papa (Solanum tuberosum) es una planta cultivada por todo el mundo por sus tubèrculos comestibles. Fue domesticada en el altiplano andino por sus habitantes hace unos 8.000 años, y más tarde fue llevada a Europa por los conquistadores españoles como una curiosidad botánica más que como una planta alimenticia. Su consumo fue creciendo y su cultivo se expandió a todo el mundo hasta convertirse hoy día en uno de los principales alimentos para el ser humano.
Las patatas se empezaron a importar a Sudamérica en el siglo XVI y tardaron otros 150 años en convertirse en uno de los alimentos básicos de Europa. Actualmente, donde más se consumen es en Europa Central y del Este, aunque están presentes en la dieta de todo el continente, con un consumo medio per cápita de 94 kg, posiblemente sean más.
Son el cuarto cultivo alimentario más grande después del arroz, el trigo y el maíz que forman parte de la cocina mundial. La humilde patata, esa que España trajo a Europa desde América, tiene fama de ser un alimento que engorda, aunque de eso pueden tener la culpa los modos más insanos de comerlas (fritas en bolsa o caloricamente salseadas). Ahora investigadores aseguran que comer patatas reduce la presión arterial y apenas engordan.
El estudio explicó que debido a las altas temperaturas empleadas en su preparación, las patatas fritas destruyen la mayor parte de las sustancias saludables. Muchas de las propiedades de este tubérculo están en la piel, por lo que merece la pena cocinarla con ella (si son nuevas).
El director del estudio, asegura que según los resultados obtenidos, la manera más sana de preservar los nutrientes de la patata es “cocida simplemente en el microondas”.
Pero más allá de que podamos disfrutar de su sabor de mil y una maneras, cuentan con numerosas ventajas a nivel nutricional.
1º Cocidas o asadas, las patatas son un alimento prácticamente libre de grasa.
2º Son un magnífica fuente de carbohidratos, la principal fuente de energía del organismo (de hecho, deberían representar como mínimo la mitad del consumo diario de calorías).
3º Una buena fuente de fibra (que ayuda a regular el tránsito intestinal) y facilitar la función digestiva. Cocida con piel contienen aún más fibra, sin embargo, hay que tener cuidado y no comersela si está descolorida o presenta marcas.
4º Aportan también vitamina C. Aunque hay muchas frutas y zumos de fruta que contienen esta vitamina, ningún otro alimento rico en almidón contiene tanta cantidad como la patata.
5º Vitaminas del grupo B, estas vitaminas tienen numerosas funciones en el organismo, incluyendo un papel importante en el metabolismo de los carbohidratos para proporcionar energía y mantener la salud de la piel y el sistema nervioso.
6º Asimismo son una buena fuente de potasio, además de contener pequeñas cantidades de otros minerales como magnesio y hierro.
7º Apenas no contienen sodio (que junto al cloruro forma la sal. Las recomendaciones sanitarias sugieren no consumir demasiada sal debido a la relación existente entre el consumo de sodio y el riesgo de tener una elevada tensión arterial (hipertensión).
8º Pueden ser muy útiles para quienes desean perder peso o evitar ganarlo. Una ración media de patatas cocidas sin piel (180 gr) contienen unas 140 calorías, un contenido energético muy inferior a la de misma cantidad de pasta cocida (286 calorías ) o arroz cocido (248 calorías). Sin embargo, estas personas deben tener cuidado ya que el contenido energético de las patatas fritas puede ser el doble o el triple del de las patatas cocidas o asadas, por lo que resultan menos recomendables para quienes desean perder peso.
9º Otro aspecto interesante para quienes no quieren ganar peso es que las patatas tienen un elevado índice de saciedad. Un estudio realizado sobre los efectos de la saciedad de distintos alimentos halló que tienen un índice de saciedad tres veces mayor que la misma cantidad de caloría de pan blanco.
10º Para quienes deben seguir una dieta sin gluten y no pueden comer muchos alimentos comunes como el pan, la pasta y la mayoría de los cereales de desayuno, las patatas tienen una gran importancia. No contienen gluten y pueden ser consumidas libremente por quienes deben evitarlo o quienes prefieren no consumir trigo por otros motivos.
Y vamos con la receta. Hoy va dedicada a mi madre que me las hacia antes muchas veces.
Patatas rebozadas (Patatas a la importancia).
Ingredientes para 3 personas:
3 patatas medianas.
2 dientes de ajo.
1 ramita de perejil fresco.
1 vaso de leche.
1 vaso de agua (o dos vasos de leche desnatada).
½ vaso de caldo.
harina.
2 huevos para rebozar y sal.
Preparación:
NOTA: Importante una cazuela grande donde quepan bien las patatas sin amontonarse demasiado.
Lo primero pelamos y lavamos bien las patatas y las cortamos a un grosor de un poco más de 1 cm.
Una vez cortadas las salamos.
Las pasamos por harina y huevo y a freír, que se doren.
Cuando estén doradas las colocamos en la cazuela, retiramos la mayor parte de aceite de freirlas y dejamos un poco en la sartén.
Picamos el ajo y el perejil lo más fino posible, y lo echamos al aceite sobrante de la sartén, lo doramos un poquito, y le añadimos el vaso de caldo y dejamos hervir.
Se lo añadimos a las patatas, también la leche y la leche desnatada o el agua, debe cubrir las patatas.
Las tapamos y dejamos cocer 45 minutos a fuego suave, luego destapamos y cocemos 15 minutos sin tapa para que se evapore y espese la salsa, moveremos de vez en cuando.
El puerro también conocido como Allium ampeloprasum var. porrum, porro, ajo porro, ajo porro o cebolla larga, es una de las variedades cultivadas de la especie Allium ampeloprasum. Como la cebolla y el ajo, esta planta pertenece a la familia de las liliáceas. Se trata de una planta bienal originaria de Europa y Asia Occidental que se cultiva por sus hojas, bulbo y flores comestibles. La otra variedad de la especie es A. ampeloprasum var. ampeloprasum, que se conoce por muchos nombres, entre ellos “ajo blandino” y “ajo elefante” y se caracteriza por producir bulbos con el aspecto de un ajo, pero de mayor tamaño.
La planta del puerro posee 3 partes que son: las hojas largas y lanceoladas (con tonalidades verde-azuladas) algo planas, el tallo y un pequeño bulbo blanco y alargado del que salen una cierta cantidad de raíces pequeñas. Un puerro suele tener cerca de medio metro de altura, y puede llegar a poseer entre 3 y 5 cm de grosor. Tiene un sabor característico, parecido al de las cebollas pero más suave. Hay que destacar que es fuente de carbohidrato llamado inulina.
Es una planta conocida en Europa desde hace mucho, consumida ya en el antiguo Egipto en el 4000 a.C. y el lejano Oriente. Los romanos la utilizaban en la cocina, y se dice que el emperador Nerón era un apasionado del puerro y lo consumía en sopas. El origen del puerro es desconocido, sería durante la Edad Media cuando el cultivo de puerros se extendería por Europa, paliando con su ingesta el hambre de las clases sociales más desfavorecidas económicamente. En la actualidad, el mayor productor y consumidor de puerro en el ámbito europeo es Francia.
En función de su época de cultivo se distinguen diversas variedades que difieren por su longitud, diámetro, consistencia en intensidad de sabor.
Puerros de otoño e invierno: son los más gruesos y de sabor fuerte.
Puerros de verano: su tamaño es menor que las anteriores variedades, son más tiernos y presentan un sabor más suave. Sin embargo, suelen tener un corazón leñoso que disminuye su calidad.
La temporada del puerro comienza a principios de otoño y finaliza en primavera, aunque es posible encontrarlos en el mercado durante todo el año.
Los puerros son vegetales muy sabrosos y bajos en grasa, que pertenecen al género Allium, al que también pertenecen las cebollas, cebolletas y ajos; son ligeramente dulces y se pueden preparar salteados con otras verduras, al vapor o preparar caldos o sopas entre otros platos, ofreciendo gran cantidad de beneficios nutricionales y medicinales.
Son una de las mejores fuentes de fibra dietética, que ayudan a saciar el organismo.
Ricos en vitamina B9 o ácido fólico, que ayuda al cuerpo a generar nuevas células y mantiene la sangre sana para oxigenar el organismo.
Proporcionan calcio que fortalece los huesos y los dientes y asegura que los músculos y los nervios están funcionando a plena capacidad. Una importante fuente de potasio, que equilibra los niveles de agua y ph del organismo.
Aportan vitamina C para reparar los tejidos del cuerpo.
Ayudan a reducir el colesterol LDL y aumentar los niveles de HDL.
Reducen el riesgo de padecer cáncer de próstata, colon y ovario.
Contienen propiedades diuréticas y anti artritis.
Tiene propiedades anti-bacterianas, y aunque no es tan potente como el ajo, contienen un compuesto llamado alliinase, y cuando se cortan, el alliinase reacciona con el oxígeno para formar un compuesto de azufre llamado alicina.
Un estudio realizado, se probó la eficacia antibacteriana de la alicina con éxito contra Staphylococcus aureus bacteria que puede provocar infecciones cutáneas y de las mucosas y las que pueden afectar al aparato gastrointestinal.
La alicina se inactiva por el calor, así que si quieres obtener todos los beneficios del puerro, mantenlo cortado unos 10 minutos antes de cocinar.
La retención de líquidos o edema es la acumulación de líquido en los espacios intersticiales entre las células, siendo más notable en los pies, tobillos, dedos o cara. La inflamación suele ser un síntoma de una enfermedad o condición subyacente, como enfermedades del riñón o del hígado, o la exposición al calor; los puerros son adecuados para apoyar el tratamiento médico debido a sus propiedades diuréticas.
Una fuente rica de vitamina A o vitamina antiinfecciosa, ya que 100 gramos de puerros contienen aproximadamente un 33% de la dosis diaria recomendada. Mantiene saludables e íntegros los revestimientos de la mucosa de la nariz, la garganta, el tracto urinario y el tracto digestivo; además de desarrollar y activar las células blancas de la sangre.
Y no podía faltar una receta típica y fácil como es la porrusalda.
Porrusalda.
Ingredientes para 4 personas:
4 puerros.
3 patatas medianas.
1 cebolla mediana.
2 zanahorias.
1 litro de agua.
Aceite de oliva y sal fina.
Preparación:
Lavamos los puerros y los picamos en rodajas, picamos la cebolla en dados finos.
En una cazuela con un chorrito de aceite sofreímos la cebolla a fuego medio 5 minutos, que no coja color, añadimos los puerros, salamos y rehogamos todo 5 minutos más.
Le ponemos la zanahoria en rodajas y las patatas “escachadas”, mezclamos y rehogamos 3 minutos.
Añadimos el agua, subimos el fuego y cuando empiece a hervir 30 minutos a fuego medio. Salamos al gusto.
En los últimos 5 minutos de cocción rallamos en el caldo una patata que se deshará durante la cocción y le dará cuerpo al caldo.
Estará lista cuando comprobemos que las patatas están en su punto. Servimos caliente.
Un plato, rico, sano y nutritivo y nada caro.
Buen provecho.
Para mas lejos : Pincha la foto para descargar. LOS ALIMENTOS QUE CURAN VOL.1
Siempre hay debates de si los alimentos curan o no curan. Mi respuesta es que los alimentos curan. Creo firmemente en el poder potencial de todo alimento de curar, mitigar la enfermedad, frenar su expansión o completar cualquier otra terapia. El debate de si los alimentos curan o no suele estar tachado de interés de todos tipos. La curación por los alimentos va a depender de varios factores: 1-La cantidad de este alimento que se consume durante un cierto perdió. 2-La forma de cocinar el alimento. 3-La crono nutrición, es decir el momento del día en que se come dicho alimento. Algunos alimentos son más efectivos, es decir, metabolizan mejor si se consumen a determinada franja horaria. Esto es debido a que el metabolismo no es estático, varía a lo largo del día. 4-La buena masticación o no. 5-La cantidad del aliento cada vez que se consume. 6-El tipo de agricultura al cuál ha sido sometido el alimento. 7-Otro factor no menos determinante, es quien consume qué. Ciertos alimentos responden mejor a ciertos biotipos. Ahora empezamos nuestro viaje para descubrir el alto impacto sobre el bienestar humano, del apio, nabo, batata y puerro, presentados por el Dr. Apollinaire Dschoutezo.
Una infusión es una bebida obtenida de las hojas, las flores, de los frutos o de semillas de diversas hierbas y plantas, que pueden ser aromáticas, y se les vierte o se les introduce en agua caliente, sin que ésta llegue al punto de ebullición.
DE MESA EN MESA like wwww.facebook.com/2mesaenmesa
El café entró en nuestra historia a través del mundo árabe. Parece demostrado que las tribus nómadas de Etiopía y Arabia, donde el cafeto crece silvestre; lo consumían, aunque no lo tomaban en forma de bebida, sino que lo machacaban y mezclaban con grasa, formando unas bolas que se iban comiendo.
Las infusiones más comunes son: el café, el té, el mate, la manzanilla, la tila y la horchata.
Los tés herbales y frutales (también llamados infusiones) son un regalo de la naturaleza para nuestro disfrute y bienestar. La gente aprecia desde hace tiempo los efectos beneficiosos de los múltiples ingredientes que han perdurado a través de los siglos en las recetas y mezclas de té.
Refrescantes y libres de cafeína, estas bebidas son todo un éxito entre jóvenes y adultos. Estos productos no deben confundirse con el té negro o verde con sabor a frutas; las hierbas y tés frutales no contienen hojas de la planta de té (camelia sinensis). Son infusiones hechas de flores, hierbas, frutas y especias. Son empaquetadas y elaboradas como té tradicional y ofrecen una amplia variedad de sabores y aromas.
Los consumes a diario, pero seguramente no sepas la gran variedad que tienes a disposición o cuáles son sus propiedades.
Té verde:
Es una medicina natural por donde se mire, es considerado el más saludable y el que otorga más ventajas que cualquier otra especie de té (sobre todo el fermentado). Mantiene sus componentes casi iguales que cuando está en su medio natural en el campo. Entre las principales propiedades del té verde podemos destacar: antioxidante que retrasa el envejecimiento prematuro, depurativo que elimina los líquidos que se acumulan en el organismo, digestivo, anti grasa que ayuda a bajar de peso.
Es rico en vitamina A,B y C, flúor, sodio y minerales. Refuerza el sistema inmune y permite que el cuerpo se proteja de las infecciones o virus.
Al tener un bajo contenido de teína, se debe preparar con agua antes de llegar a ebullición, porque de lo contrario, las hojas se cocinan y queda un sabor más amargo.
Los chinos fueron los primeros en descubrir este maravilloso té y se bebe más en Japón hoy en día. La diferencia entre ambos es el proceso de elaboración.
Té negro:
Es el más popular en la cultura occidental, el que se consume en saquitos en todo el mundo, pero también en hebras. Su sabor y sus propiedades hacen que se trate de una bebida maravillosa. Tiene una buena cantidad de antioxidantes, es saciante, bueno para el estómago y bajo en calorías. No siempre fue usado para consumo, sino que era una moneda de cambio ya que no pierde su sabor con el paso del tiempo. Las hojas de la Camelia Sinensin pasan por un proceso de oxidación para dejar de ser verde y convertirse en negro. Es estimulante por su cantidad de teína.
Té blanco:
Se le llama “el elixir de la juventud” por sus maravillosas propiedades. Se dice que es el más refinado y exquisito de los té. En lugar de las hojas, se recogen los brotes más pequeños y tiernos. De allí es que se dice que la persona que lo consume en realidad está bebiendo la juventud de la planta o su energía vital. El color claro se debe a un vello blanco que recubre a las hojas cuando recién salen y se cosecha durante pocos días en la primavera, a mano. Se produce en las altas montañas de Fujian, en China. Tiene un sabor delicioso y un aroma delicado, aporta vitaminas C y E, es antioxidante y diurético.
Té rojo:
Es denominado “Pu-erh” y conocido por sus maravillosas propiedades quemagrasas. Es el “té de los emperadores”, porque por mucho tiempo estuvo prohibido en la población de castas inferiores. Tiene un sabor muy fuerte, terroso y es de color rojizo oscuro. El proceso de maduración requiere muchos años. Beber tres tazas de este té al día elimina las grasas del cuerpo, reduce los niveles de colesterol.
Té azul:
Llamado “Oolong” o semifermentado. Estaría en el medio entre el verde y el negro. Su proceso de fermentación es interrumpido, se enrolla y oxida hasta veinte veces.
Procede de dos regiones: Fujian (China) y Formosa (Taiwán). Tiene un sabor vegetal como el verde y pueden ser más claros u oscuros según el proceso. Es antioxidante, fortalece el sistema inmune, regula el colesterol, reduce la tensión arterial y contiene vitaminas y minerales.
Manzanilla:
Es muy usada para tratar trastornos digestivos leves, indigestión, cólicos, diarrea o gastritis. Sirve también para irritaciones o inflamaciones oculares y se usa para afecciones respiratorias como asma, tos o catarro. Trata el acné y limpia heridas superficiales.
Menta:
Tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas y digestivas. Reduce las flatulencias, ahuyenta los insectos, mantiene el buen aliento y se usa para el catarro y la tos.
Tilo:
La parte medicinal del tilo está en los frutos y las flores. Es sedante y se usa como tranquilizante para el sistema nervioso. Permite mejorar la digestión y ayuda a dormir mejor. Se puede emplear para reducir problemas arteriales, cólicos y dolores menstruales.
Valeriana:
Es muy similar al tilo en cuanto a sus propiedades sedantes y relajantes. Es necesario tener cuidado con la cantidad que se consume porque puede cansar, una excesiva sedación en el sistema nervioso, bajar la presión arterial y retardar la circulación.
Anís verde:
Las hojas dan aliento fresco al masticar, es expectorante, tónico estomacal, regula los ciclos menstruales, alivia las flatulencias y ayuda a hacer la digestión.
Romero:
Tiene propiedades curativas para el sistema nervioso, refuerza la memoria y mejora la circulación de la sangre.
Hoy no os voy a dar una receta: “Pero si un consejo”.
Mucho ojo con el abuso de algunas infusiones informaros bien.
Espero que sea de vuestro agrado.
PARA IR MAS LEJO PINCHA LA IMAGEN PARA LEER:
Plantas Silvestres, Infusiones
Este libro es una guía completa de bienestar a través de las plantas. Recoge más de 200 plantas silvestres, con una descripción completa acompañada de ilustraciones para facilitar su identificación. Además, indica las infusiones y tisanas que se pueden preparar con ellas para aliviar distintas dolencias
Brassica oleracea var. viridis o Brassica oleracea Grupo Viridis, la berza común o col forrajera, también berza, berza col, col caballar, col gallega, o col abierta, es una variedad de col Brassica oleracea. Es una herbácea bienal comestible, cultivada como anual de la familia de las Brasicáceas.
Se encuentra frecuentemente en la zona norte de España, sobre todo en Asturias, Cantabria, norte de Castilla y León ( Burgos, Palencia, León), Euskadi, Navarra y Galicia, Portugal. Se utiliza frecuentemente para hacer cocidos, con patatas, productos derivados del cerdo y otros ingredientes típicos de cada zona. Es empleada también como alimentación del ganado y de los cerdos.
Las hojas verdes y suaves de esta verdura son grandes y algo carnosas. Son comestibles y sus hojas más externas (las que dan al aire) son de color verde claro mientras que las del interior son semi-blancas (se denominaba a veces como: repollo verdi-blanco). El tallo es alto y se hace leñoso al envejecer la planta. Las flores son grandes, desplegadas en ramilletes y pueden ser amarillentas o blancas. La berza es originaria de las regiones costeras de Europa Central y meridional, especialmente de Francia y Reino Unido.
Se cultiva en los huertos al comienzo de la primavera. Suele recolectarse sin problema en los meses de invierno.
Los principales usos de esta planta son culinarios: la hoja tiene un sabor fuerte apreciado en ciertos platos. Se puede decir que la berza forma parte de los platos más emblemáticos de España y Portugal. Por ejemplo en Portugal (en portugués “Couve-galega”) junto con patatas se hace una sopa muy popular denominada caldo verde que tiene categoría de plato nacional portugués. En la cocina española del norte hay numerosos platos, todos ellos de origen humilde, que van desde las berzas con patatas, los cocidos etc…
En algunos casos forma parte de platos emblemáticos como la borona (pan recubierto de hojas de berza), el cocido montañés y el pote asturiano donde forma parte de uno de sus ingredientes con legumbres, y además de Galicia el caldo gallego;; etc… Las berzas son conocidas en América, por ejemplo EEUU, como “collard green”, y son comunes en la cocina del sur de lso EEUU. En Brasil donde son conocidas gracias a la influencia portuguesa, se denominan couve (a veces se traduce como “col”) y que resulta ser uno de los entrantes de la Feijoada.
La berza es una verdura de temporada imprescindible en los meses de otoño e invierno. Nos aporta vitamina C, que aumenta nuestras defensas frente a catarros e infecciones de vías respiratorias.
Su olor se debe a unos compuestos de azufre que actúan como antioxidantes retrasando así nuestro proceso de envejecimiento. Estos compuestos azufrados son también los responsables de la formación de gases, por este motivo las personas con problemas de digestión coceran la berza con comino o hinojo. Estos compuestos de azufre tienen propiedades balsámicas y expectorantes de manera que es una verdura indicada para esos días que estamos con catarro.
Es importante masticarla bien y mezclarla con la saliva para desdoblar la fibra que tiene y así mejorar su digestión. Esta fibra ayuda a regular el estreñimiento y los niveles de azúcar y colesterol.
Contiene carotenoides, que actúan como antioxidante previniendo el envejecimiento celular y protegiendo el organismo frente a los radicales libres y la aparición de cáncer. Por su contenido en vitamina C, que inhibe el crecimiento de bacterias dañinas para el organismo, previene enfermedades vasculares al reducir la tensión arterial. Vitamina B9, Calcio, Fibra, Agua, Potasio, Vitamina E, y muchas más.
Y no podía faltar una receta.
Sopa de berza con pan frito.
Ingredientes para 4 o 6 personas:
1 berza.
2 patatas.
2 esqueletos de pollo.
4 rebanadas de pan.
4-6 cucharadas de nata fresca (para cocinar).
2 dientes de ajo.
agua, aceite de oliva.
sal, perejil.
Preparación:
Pon a cocer los esqueletos de pollo en una cazuela con abundante agua hirviendo, sal y un manojo de perejil. Deja que hierva durante 10-15 minutos.
Doramos los ajos laminados en una cazuela con un chorrito de aceite. Cortamos la berza en juliana, y la añadimos y pochamos a fuego suave. Tapamos la cacerola y cocinamos a fuego suave hasta que se ablande. Le añadimos la patata pelada y troceada el caldo colado, pon a punto de sal, cocinamos todo junto a fuego moderado durante 10 minutos y trituramos.
Cortamos el pan en dados y lo freímos en una sartén con aceite. Retiramos y escurrimos en papel de cocina.
Servimos la sopa en un plato y colocamos en el centro una cucharada de nata para cocinar. Añadimos los costrones de pan y decoramos con una hojita de perejil.
La Tagliatella en Tudela se encuentra muy cerca del margen del río Ebro, concretamente en la calle Yanguas y Miranda 9. En estas tierras de gran riqueza agrícola, despunta de nuevo la cocina del norte de Italia, impregnando los cinco sentidos del visitante.
La belleza de nuestro inconfundible estilo decorativo llama a la contemplación, los sonidos acostumbrados de un entorno 100% familiar, el olor a masa recién horneada, las texturas delicadas de nuestros guisos, salsas y cremas, y los sabores más exquisitos… tenemos una amplia variedad de platos esperándote, la elección es muy difícil, pues las combinaciones son infinitas.
Déjate aconsejar por uno de nosotros, siempre estamos dispuestos ayudarte, pues ¿sabías que las pastas adquieren su forma en función del sabor que mejor casa con ellas? Las láminas son especiales para el horno, las de cilindro lo son para las salsas más fuertes y cremosas… cada una tiene su historia y su origen, pues son específicas de las diferentes regiones de Italia.
Nuestra cocina está repleta de los ingredientes más frescos para cubrir pizzas y ensaladas, pero también te ofrecemos las recetas más sofisticadas. Todas las raciones son perfectas para compartir, así que ven con tu familia, pareja o amigos… que no vas a poder comértelo todo tú solo.
El Cucumis melo, más conocido como melón, es una planta herbácea monoica de tallos rastreros. Se cultiva por su fruto, una baya pepónide de temporada veraniega aunque ya se encuentra todo el año, al menos la mayor parte, con un gran contenido de agua y sabor dulce.
El melón ya se cultivaba en el Antiguo Egipto durante el III milenio a. C., y su cultivo se extiende por la mayoría de los continentes.
El uso medicinal del “melón”, lo demuestra su presencia en la Capitulare de villis vel curtis imperii, una orden emitida por Carlomagno que reclama a sus campos para que cultiven una serie de hierbas y condimentos incluyendo los “pepones” identificada actualmente como Cucumis melo.
Necesita por lo menos 15ºC para germinar; la siembra se hace durante el periodo libre de heladas y al aire libre, a mediados de primavera. El crecimiento de la planta no es verdaderamente activo hasta que se sobrepasan los 15ºC, situándose el óptimo hacia los 32ºC. Resiste la sequía mejor que el maíz. Es capaz de sufrir sequía durante un período bastante largo, y reemprender su crecimiento más adelante cuando cesa la sequía. Por otra parte, necesita menos cantidad de agua que el maíz para formar un kilogramo de materia seca.
Se desarrolla bien en terrenos alcalinos, sobre todo las variedades azucaradas que exigen la presencia en el suelo de carbonato cálcico, lo que aumenta el contenido en sacarosa de tallos y hojas. Prefiere suelos sanos, profundos, no demasiado pesados. Soporta algo la sal.
Es un mal precedente de otros cultivos, particularmente para los cereales de otoño. Al regar debe evitarse que el agua, toque las hojas, pues es fácil que se pudra la planta; por eso no se siembra en bancales y se prefiere hacer riego por surcos. También se puede cultivar en terrenos de secano e incluso los frutos pueden resultar más sabrosos, pero los rendimientos potenciales son menores. Es necesario hacer despulgue (rales de hojas) para evitar que crezca muy vigorosa y produzca demasiadas flores masculinas y pocas femeninas, que van a originar los frutos. En invernadero se cultivan melones que producen precozmente. Estas plantas crecen verticalmente y se sostienen con la ayuda de cuerdas.
El fruto no debe cosecharse hasta que la madurez esté asegurada, y el contenido de azúcar sea lo suficientemente elevado. Al tacto ésta se percibe cuando la corteza alrededor del pedúnculo cede ligeramente a la presión de los dedos; el peso específico del melón también es un índice característico, aumentando a medida que la madurez incrementa la densidad de la pulpa.
Se distinguen varios tipos, con múltiples variedades, los más cultivados son amarillo, galia, melón verde y piel de sapo.
Hasta hace más de una década aproximadamente, España era el país que mayor cantidad de toneladas de melones exportaba mundialmente, seguida de Estados Unidos, pero la exportación a nivel mundial de este fruto ha crecido y países como Estados Unidos, Francia, Ecuador, Colombia y otros, son los territorios que suelen incluirse entre los mayores exportadores del producto.
Si quieres bajar de peso y descansar cada noche, una buena idea es que empieces a comer más melón, una fruta deliciosa y refrescante.
Es bajo en calorías. Cada 100 gramos nos aporta 34 calorías. Además es bajo en grasas, pero si muy rico en nutrientes como vitaminas y minerales.
Tiene una buena cantidad de vitamina A, siendo la fruta que más la contiene. Un poderoso antioxidante bueno para la piel y las mucosas.
Ofrece flavonoides que protegen las células de los radicales libres, reduciendo la posibilidad de padecer cáncer de páncreas, de mama o de colon.
Mejora nuestra visión y evita a su vez la degeneración macular, frecuente por el paso de los años.
Controla la frecuencia cardíaca y la presión arterial debido a su contenido de potasio, lo que evita enfermedades relacionadas con el corazón.
Ayuda al cuerpo a resistir enfermedades provocadas por infecciones, virus y bacterias, al tener vitamina C y manganeso.
Aquí va la receta no podía faltar.
La manera más conocida es melón con jamón, pero hoy además lo haremos con tempura.
Melón con jamón en tempura.
Ingredientes para 2 personas:
1 rodaja grande de melón.
8 lonchas de jamón.
1 cebolleta.
135 gramos de harina de tempura.
100 gramos de queso azul.
una cucharada de mantequilla.
dos cucharadas de nata líquida.
200 ml de agua fría.
1 vaso de leche.
aceite de oliva.
sal y pimienta.
nuez moscada.
perejil picado.
Preparación:
Para la salsa de queso, ponemos la mantequilla a derretir en un cazo. Incorporamos la cebolleta finamente picada. Cuando esté pochadita, añade el queso troceado, la nata y la leche. Removemos, condimentamos con un poco de nuez moscada sal y pimienta. Cocinamos durante 5 minutos. Espolvoreamos perejil picado. Reservamos. Pelamos y cortamos el melón en rectángulos (como de bocado). Escurrimos el exceso de agua sobre papel absorbente. Envolvemos jamón. Cerramos con un palillo.
Mezclamos la harina de tempura con el agua lo más fría posible de la nevera y removemos hasta conseguir una pasta ni muy ligera ni muy espesa. Pasamos los pinchos y los freímos en abundante aceite bien caliente. Escurrimos sobre papel absorbente. Para servir, colocamos la salsa de queso en el fondo del plato y encima el melón.
Los salmones y truchas del Atlántico y del Viejo Mundo (el género Salmo) son peces marinos y de agua dulce de la familia de los salmónidos distribuidos por los océanos y mares de casi todo el mundo excepto el Océano Pacífico , con algunas especies que sólo viven en agua dulce en Europa y Asia. Su nombre procede del latín salmo, que es como llamaban en la antigua Roma a estos peces. En cuanto a la genética son parientes cercanos de los salmones y truchas del Pacífico (el género Oncorhynchus), y tienen una anatomía similar, aunque el análisis de ADN mitocondrial ha mostrado diferencias entre estos dos géneros.
Algunas de las especies de este género son anádromas: nacen en aguas dulces, migran al océano y vuelven al agua dulce para procrear. Se les atribuye la capacidad de volver al mismo sitio donde nacieron para reproducirse, y los estudios recientes muestran que al menos un 90% de los salmones que remontan una corriente nacieron en ella. No se sabe cómo se orientan, pero puede que su fino sentido del olfato reconozca la química de su río natal.
Son especies muy valoradas en la pesca, tanto en la deportiva como para su comercialización como alimento para consumo humano. Muchas especies son muy usadas en acuicultura.
El salmón es un alimento habitual y razonablemente sano por su alto contenido en proteínas y ácidos grasos omega – 3 , con un contenido moderado en grasas. El salmón es un pescado azul o graso que aporta unos 11 gramos de grasa por cada 100 gramos de carne, un contenido similar al de las sardinas, el jurel o el atún.
La grasa es rica en ácidos grasos omega – 3, que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos plasmáticos, y además aumentan la fluidez de la sangre, lo que previene la formación de coágulos o trombos. Por este motivo se recomienda el consumo habitual de salmón a la población en general, y en particular en caso de trastornos cardiovasculares. El salmón es una excelente fuente de proteínas de alto valor biológico.
Existen dos grandes familias de salmones, el salmón del Atlántico o europeo (Salmo salar), que se encuentra en las aguas del Atlántico y el mar Báltico, y en los ríos de Francia, Escocia, Noruega y el Norte de España; y el salmón del Pacífico, de carne más seca y rosada. El salmón se cría en piscifactorias en todo el mundo, lo que ha contribuido a potenciar su comercialización y abaratar su precio. Se distingue entre salmón salvaje, poca abundante y el de criadero, procedente de Noruega, Escocia e Irlanda, de carne menos fina y más grasa. Su calidad depende de sus condiciones de cría; en contenedores pequeños o en grandes zonas, y su alimentación. Tanto el salmón salvaje como el de criadero se comercializan frescos y ahumados.
El salmón que encontramos fresco en los mercados españoles es salmón atlántico, pero los salmones que se comercializan congelados, así como sus derivados, excepto el salmón ahumado suelen ser salmones del Pacífico. El ahumado si está procesado en España, también es salmón atlántico o europeo.
Salmón plateado, llega a pesar 3,5 kilos. Se localiza en la zona Norte del Océano Glacial y en las costas americanas y asiáticas del Pacífico. En Europa su cria en cautividad se viene realizando desde hace ya muchos años. Su carne es la más apreciada, tras la del salmón real.
Salmón real, su tamaño es el mayor de todos los salmones del Pacífico. Llegar a pesar 10 kilos. Es uno de los salmones más apreciados, pero muy escaso. Su carne es la más grasa de entre los salmones del Pacífico y más magra que la del salmón atlántico o europeo.
Los beneficios que el salmón aporta a nuestra salud van desde el fortalecimiento de los músculos y del corazón a la reducción de las probabilidades en el desarrollo de algunas enfermedades. Los estudios han demostrado que el consumo del salmón rico en ácidos grasos pueden ayudarnos a vivir más tiempo y estar más sanos durante este tiempo. Los beneficios que el salmón aporta a nuestra salud son demasiado numerosos como para ignorarlos. Es un alimento tremendamente rico en ácidos, minerales y vitaminas que nos pueden ayudar a luchar contra diversas enfermedades. Así que si comer salmón al horno, a la plancha o simplemente crudo puede convertirse en una poderosa adicción un estilo de vida saludable. La proteína de salmón es fácil para la gente de digerir y absorber por nuestro cuerpo. El salmón no contiene sustancias que causen cáncer, a diferencia de otras fuentes de proteínas. Las proteínas que también se denominan aminoácidos, so vitales para la salud de nuestro organismo. El beneficio principal que nos aporta el salmón es una excelente fuente de grasa buena o de ácidos grasos omega -3. También encontramos vitaminas A, B y D, así como minerales como el calcio, el hierro, el fósforo y el selenio.
Los ácidos grasos Omega -3 ayudan a tu cerebro a funcionar mejor, ya que mejoran tu memoria. En combinación con las vitaminas A y D, los aminoácidos y los ácidos de selenio también protegen tu sistema nervioso de los efectos de deterioro causados por el envejecimiento.
Este pescado también funciona como un antidepresivo natural. Las enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson son dos de los mayores temores que la gente tiene a medida que se hace mayor. Los ácidos omega -3 también ayudan a prevenir los coágulos sanguíneos, disminuyendo así los probabilidades de sufrir accidentes cerebrovasculares.
Otro de los beneficios de comer salmón es la aceleración del metabolismo. Esto facilita la tasa de absorción de azúcar. disminuyendo así, tu nivel de azúcar en sangre. A su también reduce tu riesgo de desarrollar diabetes. Ayudar a prevenir la degeneración macular. Es una condición médica relacionada con la edad que afecta a las personas mayores y que te puede provocar daños y perdidas de visión.
El alto contenido de vitamina B3, hace que sea un alimento beneficioso para el sistema circulatorio, además puede ayudar a reducir el colesterol.También es recomendable para combatir enfermedades como la diabetes, la artritis el tinnitus (zumbido de oido).
Muy recomendable por la abundancia de vitamina B6, para casos de diabetes, depresión y asma, puede reducir los sintomas del tunel carpiano.
Su alta cantidad de vitamina D del salmón hace que sea recomendable para fortaceler la piel y los huesos. Además el consumo de alimentos con vitamina D ayuda a fortalecer el sistema inmunitario y ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer.
Me he quedado alucinado por todos los beneficios de este pescado que son muchos e muy importantes, y aún hay gente que no le gusta.
Vamos a por la receta.
Tartaletas de pasta brisa, rellenas de salmón marinado y cubiertas de salsa holandesa.
Ingredientes para 4 personas:
16 tartaletas de pasta brisa.
1 lomo de salmón de 300 gramos.
1 hinojo con las ramitas verdes.
1 limón.
1 naranja.
1 cucharada de azúcar.
sal y pimienta.
hierbas aromáticas para decorar.
vinagreta.
Para la salsa holandesa:
200 gramos de mantequilla.
2 yemas de huevo.
zumo de ½ limón.
1 cucharada de vino blanco.
sal y pimienta.
perejil picado.
Preparación:
Cortamos el salmón en tacos y los ponemos en un bol. Salpimentamos y añadimos una pizca de ralladura de limón y naranja. Agregamos unas ramitas de hinojo finamente picadas y el azúcar. Mezclamos bien y dejamos reposar 20 minutos como mínimo. Después, limpiamos un poco los tacos con papel de cocina.
Preparamos la holandesa, derretimos la mantequilla en una cazuela. Retiramos la espuma que aparece en la superficie y dejamos que temple.
En un bol y al baño María, ponemos las yemas, un chorrito de vino blanco, y lo batimos para que monte. Añadimos la mantequilla poco a poco mientras seguimos batiendo. Echamos unas gotitas de zumo de limón, sal, pimienta y perejil picado, mezclar bien.
Ponemos un trozo de salmón en cada tartaleta y colocamos la mitad en la bandeja de horno. Las cubrimos con la holandesa y las gratinamos en el horno durante 30 segundos. Mojamos el resto de las tartaletas con un chorrito de vinagreta y cubrimos con la salsa.
Las décoramos con hierbas aromáticas.
Y listo las servimos todas mezcladas.
Y hasta aquí es todo por hoy. A comer salmón por todas sus propiedades.
Hace seis meses aproximadamente abrió las puertas en la plaza de los fueros de Tudela, José Aguado su restaurante de nombre TOPERO, hablar de este lugar y su dueño es encontrarnos con un especialista en joyas que son los platos elaborados con las verduras de la huerta. Un lugar acogedor con gran profesionalidad, cálida decoración, y donde te tratan con sumo mimo y gusto.
Nos encontramos un menú de verduras compuesto de 8 platos.
La anemia es uno de los padecimientos más comunes de nuestros días, se produce cuando hay una baja concentración de hemoglobina en la sangre debido a distintos factores, desde bajo consumo de hierro o deficiencia en su absorción hasta razones más importantes como hemorragias o determinadas enfermedades. La más común es aquella que se presenta por la deficiencia de hierro y que puede tratarse a través de la alimentación, por ello te doy algunas sugerencias para que sepas cómo alimentarte para curar la anemia.
Los síntomas de la anemia pueden variar dependiendo de la edad y la nutrición de la persona pero en general se manifiestan a través de:
– cansancio y agotamiento.
– debilidad.
– dificultad para respirar al realizar esfuerzo.
– tristeza.
– apatía.
– taquicardia, en ocasiones.
Sin embargo, cabe destacar que la anemia puede ser en muchas ocasiones asintomática, por lo que las personas que la padecen es posible que no se den cuenta de ellos hasta que no se realizan un análisis de sangre donde se ve reflejado.
Ante este cuadro es muy importante acudir al médico pues la anemia más que una enfermedad propiamente dicho es el síntoma de una condición determinada, ya sea la deficiencia de hierro o cualquier otro padecimiento mayor como problemas renales.
Si se trata de baja presencia de hierro en la dieta debes comenzar a incorporar ciertos alimentos. En cuanto a las proteínas animales las mejores opciones son el hígado, la carne roja (de preferencia magra y a la plancha para evitar calorías extras), los pescados azules como el salmón o la trucha y los mariscos.
En algunos casos, además de adaptar la alimentación, puede ser necesario agregar a la dieta suplementos de este nutriente para alcanzar los niveles de hierro apropiados. Aun así, el hecho de añadir hierro a la dieta siempre deberá estar sujeto a prescripción médica.
Vegetales inclúyelos en tu dieta legumbres como las judías, guisantes, soja o lentejas y vegetales de hoja verde como la espinaca, los canónigos, el brócoli o las acelgas. Los cereales integrales también serán de gran ayuda para mejorar tus niveles de hierro y curar la anemia.
Una porción diaria de frutos secos (un puñado), debes también consumir, como las almendras, nueces, pistachos, pipas de girasol o avellanas. Mejor en su versión natural y sin sal, mucho más saludables. A pesar de ser buenos para el corazón y el cerebro, no te excedas pues contienen también mucha grasa.
Para la merienda podemos optar por los higos, pasas o ciruelas secas, dátiles o aceitunas, todos ricos en hierro ideales para mejorar los niveles de hemoglobina en la sangre.
Del mismo modo, también puedes optar por consumir cereales, ya que se trata de un alimento con un alto aporte en hierro, por lo que serán ideales para combatir la anemia.
Recuerda que si estas sufriendo anemia debido a un déficit en el consumo de hierro deberás incorporarles de forma efectiva a tu alimentación de ahora en adelante cuidando lo que comes para llevar una dieta lo más equilibrada y nutritiva posible. En caso de que se trate de anemia en el embarazo, deberás tener en cuenta todas las recomendaciones que te haga tu médico para asegurar tu salud y la de tu bebé, ya que la medicación no está recomendada durante el proceso de gestación.
Una receta sencilla.
Un zumo.
En la licuadora:
1 vaso de zumo de naranja.
2 almendras.
1 mango o una rebanada de papaya.
1 cucharada de levadura de cerveza.
1 cucharada de miel de abeja.
1 yema de huevo.
Lo licuamos durante unos minutos y servimos sin colar.
Ya tenéis una pequeña introducción a los alimentos que debéis consumir cuando teneis anemia.